sábado, 29 de junio de 2013

“LA FE DERRIBA FRONTERAS Y NOS UNE POR LA PAZ”


8º Encuentro de Iglesias Hermanas Y 6ª Fiesta por la Paz en la frontera Colombo-Ecuatoriana

En los días 27 y 28 de junio de 2013 en el Seminario “La Encarnación”, en Lago Agrio - Sucumbios - Ecuador, se realizó el VIII encuentro de las Iglesias Hermanas de la frontera amazónica entre Colombia y Ecuador, y la VI Fiesta por la Paz. Participaron del encuentro alrededor de 120 delegados/as del Vicariato de Sucumbíos (encabezado por Mons. Paolo Mietto), Vicariato de Pto. Leguízamo-Solano (encabezado por Mons. Joaquín Pinzón), Diócesis de Mocoa-Sibundoy (encabezado por P. Julio Burbano, en representación de Mons. Luis Parra) y representantes de la diócesis de Ipiales, misión Scalabriniana y de diversas organizaciones.

Durante el primer día del encuentro se trató de reflexionar el contexto político del conflicto armado en Colombia, la realidad de los refugiados en Ecuador y como están viviendo la población en la frontera colombo-ecuatoriana (a partir del relato de los participantes, campesinos, afros e indígenas que viven en las riberas del río Putumayo). Al final del día, Mons. Joaquín Pinzón presidió la Eucaristía y por la noche se llevó a cabo presentaciones culturales.

En la mañana del segundo día, se definieron los compromisos generales y se marcó el próximo encuentro a realizarse en la diócesis de Mocoa-Sibundoy los días 12-16 de mayo de 2014. En seguida, con la participación de diversas escuelas nos pusimos a celebrar la Fiesta por la Paz, con una caminada alegre por las principales calles de Lago Agrio, hasta la catedral Ntra. Sra. del Cisne, donde se celebró la Eucaristía de clausura, presidida por Mons. Paolo Mietto.

 
MENSAJE FINAL

“Nosotros/as, las Iglesias Hermanas de Mocoa-Sibundoy (Colombia), de Puerto Leguízamo-Solano (Colombia) y de Sucumbíos (Ecuador), reunidos en Lago Agrio, Ecuador, los días 27 y 28 de junio de 2013, para el VIII Encuentro de Iglesias Hermanas y VI Fiesta por la Paz, agradecemos a Mons. Paolo Mietto y a los/as agentes de pastoral de la Iglesia San Miguel de Sucumbíos por animar este espacio fraterno y de compartir de las Iglesias Hermanas de esta bella Frontera Amazónica colombo-ecuatoriana. Agradecemos también a la participación del nuevo Obispo del nuevo Vicariato Apostólico de Puerto Leguízamo-Solano, Mons. Joaquín Pinzón, por la motivación, acompañamiento y entusiasmo, y a Mons. Luis Alberto Parra, de Mocoa-Sibundoy, por enviar delegados/as que mucho aportaron y engrandecieron los momentos compartidos.

Un agradecimiento especial a la Misión Scalabriniana de Sucumbíos por el apoyo en la organización de este encuentro, a ACNUR-Putumayo por apoyar a las delegaciones de Colombia y a la participación de los invitados de la Diócesis de Ipiales. No podríamos dejar recordar a Mons. Gonzalo López Marañón y Mons. Francisco Javier Múnera por el impulso y dinamismo en este camino desde hace 9 años.

Este encuentro nos motiva a unir esfuerzos para dar respuestas a los desafíos que amenazan la vida del pueblo de Dios en esta frontera colombo-ecuatoriana, con los constantes hostigamientos, violencia armada y sus consecuencias, desplazamientos masivos, debilidad en las cuestiones legales, salud y educación, explotaciones mineras y petroleras que generan contaminación y problemas sociales y eclesiales…

Como compromisos asumidos queremos:  1) retomar y fortalecer la Pastoral de Fronteras y el equipo de pastoral fronteriza, que funcionaba hace unos años; 2) recuperar los espacios de encuentro que son el Encuentro de Iglesias Hermanas, Fiesta por la Paz y Encuentro de Espiritualidad Indo-cristiana, desde los 4 ejes temáticos: movilidad humana y derechos humanos, minorías étnicas y tierra- territorio; 3) colaboración recíproca (intercambios, incluso, cuando necesario, algún apoyo logístico) y apoyarnos en gestión de proyectos, capacitación, formación, proyección pastoral en la zona de frontera; 4) acercarse a la iglesia de Perú; 5) visitar con más constancia las comunidades, sobre todo las del río, que viven en las zonas más conflictivas.

Finalmente, queremos señalar que estos son espacios que nos unen y nos fortalecen, demostrando que no estamos solos/as y que “el río no nos separa, nos une”. En este aspecto, queda marcado el próximo Encuentro de Iglesias Hermanas y Fiesta por la Paz en la Diócesis de Mocoa-Sibundoy (con local  a definir), del día 12 al 16 de mayo de 2014.”

 

jueves, 27 de junio de 2013

Y los recuerdos y la solidaridad nunca dejaron de llegar, a igual que las bendiciones que nos sigue enviando desde el cielo

 
Queridos hermanos y hermanas:
                                                                    Hoy, 20 de junio, es el día en que nuestro querido hermano Jesús celebra la vida, ahora ya junto al Padre. Que él nos envíe desde el cielo la gracia que necesitamos para seguir construyendo el Reino que también soñó cuando estaba entre nosotros. ¡Sobre todo se lo pedimos para Isamis! Un abrazo inmenso para cada uno/a y los tenemos presentes en nuestra oración de cada día, sus hermanas carmelitas argentinas-sucumbienses.
Carmelo de María
 
 
Gracias Hermanas Sucumbienses de Caucete, a todas y cada una.
Un abrazo especial para ti hoy Susana, para tu padre, tíos/as, hermanos/as y para toda la familia Arroyo Castellanos con el cariño de siempre.
Seguimos firmes en la Vigilia permanente de ISAMIS, en el recuerdo y la comunión con Jesusillo, en el seguimiento del Señor, las amistades y sueños de Reino compartidos.
El día domingo 30 de junio, como ya sabrán nos uniremos a las 10 de la mañana en la Misa por Jesús y por todos/as las misioneros/as que han dado su vida en ISAMIS, que se celbrará en la Catedral de Lago Agrio en el marco de clausura del Congreso Diocesano Misionero.
Susana vivimos agradecidos cada día por el tío Jesús y su testimonio de amor en nuestras vidas y en nuestra querida ISAMIS, eso entre otras cosas sigue animándonos a testimoniar y defender la Iglesia que queremos, en la que creemos y que sigue con la esperanza de ser fiel a Jesús de Nazareth y su Evangelio y al magisterio y espíritu de la Iglesia Latinoamericana.
Otro abrazo grande, solidario, fraterno para todos y sororo para todas.
Ruth
Lago Agrio, Sucumbíos
 
 
Hola a todos y a todas,
Buenos días desde España, concretamente desde Madrid. Hace un ratito que he llegado a mi trabajo y ahora acabo de conectarme para ver mi correo y maravillosa sorpresa la que me encuentro…
Ahí seguís toda la familia de Ecuador del Tío Jesús…….ahí y aquí….todos juntos……
La verdad es que casi no sé ni que decir. Sólo puedo adelantaros que hoy en cuanto acabe mi jornada laboral iré a Burgos a pasar el fin de semana, a ver a la familia y así estar con todos ellos…Ya lo hicimos el pasado, cuando todos nos acordamos de ese fatídico accidente el día 16…
Sólo puedo añadir, que por supuesto iré al cementerio, y le llevaré rosas….. rojas… porque aunque aquí en España dice la tradición que hay que llevar otro tipo de flores…. pero con vuestro permiso… a mí me gustan las rosas………..y por eso las voy a llevar. Hablaré con él y con Él, como sé que vosotros también hacéis, y por supuesto, le transmitiré todos los mensajes y las palabras de amor y cariño que me están llegando a través del correo electrónico, y también a toda familia, se lo leeré.
Y poco  más familia, espero que estéis todos bien, peleando y sacando adelante vuestro día a día
Y para despedirme en el día de hoy además de mandaros ymil besos……….os escribo unas palabra del escritor Julio Cortázar, que expresan perfectamente el cómo me siento…
 “  LAS PALABRAS NUNCA ALCANZAN, CUANDO LO QUE HAY QUE DECIR….DESBORDA EL ALMA”
Con todo mi cariño, un fuerte abrazo, Susi
Susana Pérez Arroyo

 
Susy: llévale rosas rojas, sin problemas por nuestra parte. Y me gustó la frase de Cortázar. Y dile que seguimos adelante. Porque eso se lo decimos todos los dias, sean éstos claros o haya nubarrones.

Y se me ocurre que él debe haber presionado para que sea Francisco el nuevo obispo de Roma, con los mismos zapatos de siempre. Ahora solo falta que nos mande otro a Sucumbios que "huela a oveja" porque los que mandaron al principio olían más a matadero.
Bueno, seguiremos en esta "video conferencia" celestial en torno a nuestro amigo presente-ausente.
 
Un abrazo. Tasio.
 
Amigos en Jesús:
Desde Paraguay nos unimos a las oraciones.
Aun tenemos un nudo en la garganta cuando recordamos todo lo lindo que vivimos con Jesús y sabemos que no esta para contestar una llamada o un correo.
Sin embargo sabemos que desde el cielo está rogando por nosotros que seguimos luchando en este "valle de lágrimas" como rezaba mi mamá.
Jesús estuvo en Paraguay y conoció de cerca la realidad de este empobrecido país. Ahora estamos próximos a recibir a un nuevo gobierno que pinta más de lo mismo.
Un abrazo fuerte a todos.
Cecy y Pepe

 
Hola, amigos y amigas,hermana y hermanos...
Siempre es una alegría poder compartir la vida con ustedes... y sobre todo cuando es una vida plena. Jesús, el de Nazaret, primero y Jesús, el del Arroyo, después, nos comparten a todos y todas esa vida plena que ellos ya disfrutan junto al Padre.
Ciertamente que todavía resulta difícil entneder, y más aún aceptar... ciertas situaciones, como las que nos dejaron para que nosotros las enfrentemos, primero el de Nazaret y luego el del Arroyo... como que se confabularon... para echarnos la carga encima.
Para nuestra querida Isamis y para nuestra querida Delegación OCD Ecuador, ha sido un año duro, como una noche oscura que se alarga y no se ve todavía la claridad del nuevo día. Pero quiero escuc har que ambos nos dicen: "Sigan adelante con valentía, con alegría< no tengan miedo, lo que tengan que hacer haganlo aunque les critiquen, aunque les persigan y les saquen de la casa, aunque la misma Congregación de la Fe les envíe alguna carta....."
Esa cofianza y esa fuerza que Jesús A. recibía del Jesús de N., son las que nosotros y nosotras necesitamos y les pedimos que nos las envíen y nos lashagan sentir y experimentar dentro de cada uno y de cada una.Y que sigamos llevando ese mensaje tan bueno que nos dejaron.
Confiamos en sus oraciones.
Para todos y todas un fuerte abrazo de comunión con Jesús de N y Jesús A. y todos y todas quienes siguen su camino.
Juan B
 
 
 
Mi querido Juanito: quiero acompañarles en estos dias. A ISAMIS, a los quedaron en Lago y Sucumbíos y los "SEIS" que en el COCA son "cuatro".

Se nota en tu correo el dolor y el esfuerzo por sobreponerte. Si para nosotros, los un poco lejanos, nos cuesta, cuánto te costará y os costará en el Cañon de los Monos.

Quiero que sientas y sintais, que estamos cerca de vosotros muchos y de muchas partes. Que nos duele y que tenemos que hacer un gran esfuerzo para sentir alegría. A mi me cuesta mucho y, si sigo a Juan de la Cruz, me están purificando pero a fuego lento. Amo a la Iglesia pero con un amor de 70 años, no de 20.  Veo y sufro los defectos y me duelen más las actitudes de quienes tienen "el poder de la sotana, el anillo o el pectoral". Siento cómo los jóvenes que piensan les duele la iglesia, al paso que los "fanatizados" están felices.

Pero... hay que seguir adelante, como decía Tony de Mello "por lo menos para que no me convenzan a mi".

Y desde ahí, hablo con alegría con Jesús (los dos) y le spido fuerza para mi y para ustedes. No sé cuando llegará el alba, pero quiero disfrutar de la noche y tampoco quiero que "me roben la esperanza".

Un fuerte abrazo. Tasio.
 
 
 
 

sábado, 22 de junio de 2013

Al incio de la semana, donde celebraremos la Pascua de nuestro hermano querido Jesús Arroyo

 
Buenos días, querido hermano, amigo, compañero… carmelita Jesús Arroyo!
Ya se cumple un año de tu viaje. Como se ven las cosas desde “arriba”? Me imagino que tu tocayo Jesús te permitirá ver las cosas con el color de sus lentes.  A nosotros nos cuesta mucho ver la realidad desde Jesús. Ciertamente lo intentamos pero nos cuesta entender, nos cuesta ver más allá de los hechos.
Creo que nos pasa como a aquel niño que estaba debajo de la mesa, viendo desde allí el mantel que la abuela María estaba bordando. Y claro no veía más que hilos de diferentes colores, que se cruzaban sin ningún orden ni concierto. Hasta que le cogió la abuela, lo sentó en sus rodillas y ahí pudo contemplar una bonita estampa donde Jesús jugaba, reía y cantaba con un grupo de niños y niñas.
No será ya hora de salir de debajo de la mesa?  No será que tú nos puedes ayudar? Cuánta falta nos has hecho. Cuánto te hemos echado de menos. Cómo te hemos extrañado y te hemos recordado en las Vigilias.
Fíjate que ahora ha venido el Papa Francisco y como que nos está animando  a seguir adelante. El nos dice que tenemos que oler a oveja, que tenemos que hacer una Iglesia pobre y para los pobres; que tenemos que vivir nuestra fe con alegría, que no tenemos que tener miedo. A los de la CLAR les dijo que no tienen que tener miedo, que tienen que seguir adelante, aunque les llegue una carta de la Congregación de la Doctrina de la Fe. Igualito que a nosotros.
El otro día me acordé de ti y de Gonzalo viendo al Papa Francisco en su papamóvil, recorriendo la Plaza de S. Pedro, con un niño especial vestido con la camiseta de Messi… igualito que Gonzalo cuando recibió el homenaje en el Congreso Nacional y le acompañaba Dieguito, el de la Pista, el hijo de doña Gloria Tinoco,  lo recuerdas?
Te cuento que las Comunidades de Sucumbíos te recuerdan mucho, especialmente en las Vigilias. Ya vamos por la 262. Si vieras qué espíritu, qué alegría y qué esperanza mantienen :  a pesar de la guerra que les están haciendo algunos que se auto-titulan "carismáticos", los oscuros rezagos de la  caballería heralda, algunos Judas que se cebaron en el tiempo de Gonzalo y hoy han evidenciado su real faz y los curas que hacen parte de la intervención anti. Evangélica desde fuera...Se percibe en ellas esa fuerza y esa presencia viva del Señor Jesús, como en las Primeras Comunidades.
Estamos esperando que esas propuestas que el Papa Francisco viene planteando, de una Iglesia pobre y para los pobres, una Iglesia que no tenga miedo de salir al mundo para llevar ese mensaje de Paz y de Esperanza… aunque se equivoque, pero que lo haga con amor, de obispos que sean pastores y que huelan a oveja. El otro día le decía a un grupo de sacerdotes: "No es en la búsqueda espiritual (...) que encontramos al Señor"… "Necesitamos salir (...) a la periferia, donde hay sufrimiento”.
Confiamos en que todo eso se vaya traduciendo en acciones y que podamos nuevamente seguir construyendo esa Iglesia de Comunión y Participación, esa Iglesia de Comunidades vivas y comprometidas… pero con alegría y con libertad, como lo hemos vivido durante tantos años.
Oye, Jesús, y no será que tú nos puedes echar una mano desde ahí, desde tus encuentros con tu tocayo, el Otro Jesús, y con su Madre María y con el Padre Dios?
Gracias, hermano Jesús… y seguimos trabajando juntos por la causa del Reino. Vale?
Un fuerte abrazo.
J. el  discípulo  amado

viernes, 21 de junio de 2013

Bondad, humildad y humanidad - 100 días de ilusión

Ha roto la dinámica del miedo y del control. No quiere "hipócritas de la casuística"

Llevamos cien días disfrutando de la ilusión que encarna el Papa Francisco. Ilusión que se palpa y se nota entre los fieles de todas las edades y condiciones. Ilusión compartida no sólo entre los fieles sino también entre el resto de la población. Incluso los más indiferentes o alejados de la Iglesia miran con benevolencia esta nueva etapa que se ha abierto en el Vaticano. Y no digamos la opinión publicada, que sigue deshaciéndose en elogios al nuevo Papa.
 
En cien dias, Francisco se ha ganado al mundo. Principalmente por su bondad, por su humildad y por su humanidad. El Papa seduce y transmite bonhomía. Como un nuevo Juan XXIII. Le basta con sonreír y su cara es el reflejo de su alma. Transmite tanta humildad que se hace querer sin esfuerzo. Y cuanto más alto es el personaje que se humilla más lo agradece la gente. Dicen algunos, en broma, que es "demasiado humilde para ser argentino". Y rezuma humanidad. Estamos viendo un Papa humano sin dejar de ser espiritual. Se muestra tal cual es. Sin falsas distancias. Con sus gestos, sus ademanes y sus expresiones comunica que es un hombre, por muy Papa que sea también. Un hermano más.
 
Bondad, humildad y humanidad que las transmite con naturalidad, con espontaneidad, sin necesidad de posar, de fingir, de actuar. Le salen del hondón del alma. Se muestra tal cual es, sin trampa ni cartón. Hasta con sus defectos y con su peculiar sentido del humor. Al séquito venezolano de Maduro, por ejemplo, les dijo: "Recen por mí, pero a favor, ¿eh?".
Es tanta la ilusión y las espectativas creadas que algunos creen que, tarde o temprano, nos va a defraudar. No lo creo. Y, aunque así fuese, que nos quiten lo bailado y disfrutado. Eso sí, ojalá nos dure un poco más lo bailado. En cualquier caso, el efecto Bergoglio es ya visible y evidente. Y empieza a calar entre los propios obispos.
 
Ha vuelto a estar de moda, entre ellos, el hablar de compromiso y de pobres y de salir a las fronteras de la vida y de tener entrañas de misericordia y de ser una Iglesia samaritana, dialogante, y de repartir la ternura y la caricia de Dios...Y de ser austeros y de vivir sencillamente y dar ejemplo de humildad...Y tanta sotras cosas que, hasta hace poco tiempo, ponían a los que las decían en el disparadero y en el tiro al blando de los "tirapiedras"...que se han quedado con las piedras en las manos.
 
En estos cien días ya le cambió la cara al Vaticano y a la Iglesia, en general. Ha roto la dinámica del miedo y del control. No quiere "hipócritas de la casuística". Prefiere curas, frailes, monjas, teólogos y hasta (o sobre todo)obispos que "pidan perdón antes de pedir permiso". Que se equivoquen, pero que trabajen en la viña del Señor. Que salgan a las periferias, que se entreguen por los pobres. Toda una revolución. Tranquila, pero revolución de fondo. Y en cien días.
 
Pronto irán llegando las concreciones de ese cambio tranquilo. Como buen jesuita, no quiso entrar como elefante en cacharrería: llegó, escuchó, examinó y, pronto, comenzará a tomar decisiones concretas y tangibles. Que, sin duda, serán importantes. Aunque, a mi juicio, lo más importante es el cambio de ciclo, de tendencia, de rumbo...
 
José Manuel Vidal

domingo, 16 de junio de 2013

Domingo décimo primero del tiempo ordinario


 
Lectura orante del Evangelio: Lucas 7,36-8,3

 

“A quien nuestro Señor hiciere esta merced, déle muy muchas gracias… y verá cómo recibe más y más. Sea bendito por siempre jamás, amén” (Santa Teresa de Jesús de Ávila: 6 Moradas  2,5).

Una pecadora… vino con un frasco de perfume y ungía con el perfume. Una pecadora se acerca a Jesús. Sabe quién es y todos saben quién es y lo que se dice de ella en el pueblo. Pero lo más importante es que esta mujer, a la que le han quitado el nombre y ya todos llaman ‘la pecadora’, ha intuido quién es Jesús. No entiende por qué la ama tanto, por qué no la condena. El amor de Jesús, tan gratuito y sorprendente, despierta en ella el perfume que llevaba escondido en el corazón y se pone a amar a Jesús con el callado amor, sin importarle lo que digan a su alrededor. Así podemos comenzar hoy a orar: dejándonos empapar por este espíritu tan lleno de Evangelio de esta mujer. Saber que tú, Jesús, me amas. Ahí está todo.

‘Simón, tengo algo que decirte’. Un fariseo, Simón, éste sí tiene nombre y renombre, ha invitado a Jesús a su casa. Especialista en juzgar y condenar, se aleja de la pecadora y desprecia a Jesús, porque se deja tocar por ella. Sabe mucho de normas, pero no de Dios. Ve sombras en los demás, pero no ve las suyas. No tiene corazón, no sabe amar. Parece que está vivo y está muerto. Jesús tiene algo que decirle, tiene mucho que decirle. Nuestra oración continúa así: dejar que Jesús nos diga el amor y saque a la luz el fariseo escondido que llevamos. Dime lo que tengas que decirme, Jesús.  

‘¿Ves a esta mujer?... Sus muchos pecados están perdonados, porque tiene mucho amor’. Jesús ofrece al fariseo los ojos de Dios, cuya santidad no se contamina al tocar nuestro pecado; le invita a que abandone la mirada de desprecio y estrene una mirada de bondad. Jesús todo lo pone del revés, presenta a la pecadora como evangelio, porque ha amado mucho y el amor está por encima del pecado. Oramos mirando a los que consideramos pecadores en nuestra mente; ellos pueden sacar fuera nuestro pecado y liberar nuestro corazón para acoger el amor entrañable de Jesús. Bájame, Jesús, de este pedestal de falsa santidad al que he subido. Bájame, Jesús.

Jesús dijo a la mujer: ‘Tu fe te ha salvado, vete en paz’. La pecadora ha entrado en la dinámica del amor; sabe que es amada. Marcha con una paz alegre por los caminos; ha sido salvada por Jesús. El perdón gratuito de Jesús la ha despertado a amar. Ahora sabe lo que es vivir. Puede trabajar por un futuro nuevo desde la compasión y la ternura. Detrás queda Jesús con más enemigos. Su mensaje suena escandaloso a los que se creen mejores que los demás. ¿Por qué ama a los malos? ¿Por qué se deja amar por los que son malos? Tienen miedo de Él. Nuestra oración no puede terminar de otra manera que confiando totalmente en Jesús, el que perdona nuestros pecados. Nos conoce, nos acepta como somos. Te alabo y te bendigo, Jesús. Confío en ti.  

¡FELIZ DOMINGO! Desde el CIPE – junio 2013

miércoles, 12 de junio de 2013

HOMILÍA DEL PAPA FRANCISCO SOBRE CORPUS CRISTI



Queridos hermanos y hermanas:


En el Evangelio que hemos escuchado hay una expresión de Jesús que me sorprende siempre: “Denles ustedes de comer” (Lc 9,13). Partiendo de esta frase, me dejo guiar por tres palabras: seguimiento, comunión, compartir.




SEGUIMIENTO
 
1.- Ante todo: ¿quiénes son aquellos a los que dar de comer? La respuesta la encontramos al inicio del pasaje evangélico: es la muchedumbre, la multitud. Jesús está en medio a la gente, la recibe, le habla, la sana, le muestra la misericordia de Dios; en medio a ella elige a los Doce Apóstoles para permanecer con Él y sumergirse como Él en las situaciones concretas del mundo. Y la gente lo sigue, lo escucha, porque Jesús habla y actúa de una manera nueva, con la autoridad de quien es auténtico y coherente, de quien habla y actúa con verdad, de quien dona la esperanza que viene de Dios, de quien es revelación del Rostro de un Dios que es amor. Y la gente, con gozo, bendice al Señor.


Esta tarde nosotros somos la multitud del Evangelio, también nosotros intentamos seguir a Jesús para escucharlo, para entrar en comunión con Él en la Eucaristía, para acompañarlo y para que nos acompañe. Preguntémonos: ¿cómo sigo a Jesús? Jesús habla en silencio en el Misterio de la Eucaristía y cada vez nos recuerda que seguirlo quiere decir salir de nosotros mismos y hacer de nuestra
vida no una posesión nuestra, sino un don a Él y a los demás.




COMUNIÓN
 
2.- Demos un paso adelante: ¿de dónde nace la invitación que Jesús hace a los discípulos de saciar ellos mismos el hambre de la multitud? Nace de dos elementos: sobre todo de la multitud que, siguiendo a Jesús, se encuentra en un lugar solitario, lejos de los lugares habitados, mientras cae la tarde, y luego por la preocupación de los discípulos que piden a Jesús despedir a la gente para que vaya a los pueblos y caseríos a buscar alojamiento y comida (cfr. Lc 9, 12).


Frente a la necesidad de la multitud, ésta es la solución de los apóstoles: que cada uno piense en sí mismo: ¡despedir a la gente! ¡Cuántas veces nosotros cristianos tenemos esta tentación! No nos hacemos cargo de la necesidad de los otros, despidiéndolos con un piadoso: “¡Que Dios te ayude!”. Pero la solución de Jesús va hacia otra dirección, una dirección que sorprende a los discípulos: “denles ustedes de comer”. Pero ¿cómo es posible que seamos nosotros los que demos de comer a una multitud? “No tenemos más que cinco panes y dos pescados; a no ser que vayamos nosotros mismos a comprar víveres para toda esta gente”.

Pero Jesús no se desanima: pide a los discípulos hacer sentar a la gente en comunidades de cincuenta personas, eleva su mirada hacia el
cielo, pronuncia la bendición parte los panes y los da a los discípulos para que los distribuyan. Es un momento de profunda comunión: la multitud alimentada con la palabra del Señor, es ahora nutrida con su pan de vida. Y todos se saciaron, escribe el Evangelista.


Esta tarde también nosotros estamos en torno a la mesa del Señor, a la mesa del Sacrificio eucarístico, en el que Él nos dona su cuerpo una vez más, hace presente el único sacrificio de la
Cruz. Es en la escucha de su Palabra, en el nutrirse de su Cuerpo y de su Sangre, que Él nos hace pasar del ser multitud a ser comunidad, del anonimato a la comunión. La Eucaristía es el Sacramento de la comunión, que nos hace salir del individualismo para vivir juntos el seguimiento, la fe en Él.



Entonces tendremos todos que preguntarnos ante el Señor: ¿cómo vivo la Eucaristía? ¿La vivo en forma anónima o como momento de verdadera comunión con el Señor, pero también con tantos hermanos y hermanas que comparten esta misma mesa? ¿Cómo son nuestras celebraciones eucarísticas?




COMPARTIR
 
3.- Un último elemento: ¿de dónde nace la multiplicación de los panes? La respuesta se encuentra en la invitación de Jesús a los discípulos “Denles ustedes”, “dar”, compartir. ¿Qué cosa comparten los discípulos? Lo poco que tienen: cinco panes y dos peces. Pero son justamente esos panes y esos peces que en las manos del Señor sacian el hambre de toda la gente.



Y son justamente los discípulos desorientados ante la incapacidad de sus posibilidades, ante la pobreza de lo que pueden ofrecer, los que hacen sentar a la muchedumbre y distribuyen - confiándose en la palabra de Jesús - los panes y los peces que sacian el hambre de la multitud. Y esto nos indica que en la Iglesia pero también en la sociedad existe una palabra clave a la que no tenemos que tener miedo: “solidaridad”, o sea saber `poner a disposición de Dios aquello que tenemos, nuestras humildes capacidades, porque solo en el compartir, en el donarse, nuestra vida será fecunda, dará frutos. Solidaridad: ¡una palabra mal vista por el espíritu mundano!



Esta tarde, una vez más, el Señor distribuye para nosotros el pan que es su cuerpo, se hace don. Y también nosotros experimentamos la “solidaridad de Dios” con el hombre, una solidaridad que no se acaba jamás, una solidaridad que nunca termina de sorprendernos: Dios se hace cercano a nosotros, en el sacrificio de la Cruz se abaja entrando en la oscuridad de la muerte para darnos su vida, que vence el mal, el egoísmo, la muerte.



También esta tarde Jesús se dona a nosotros en la Eucaristía, comparte nuestro mismo camino, es más se hace alimento, el verdadero alimento que sostiene nuestra vida en los momentos en los que el camino se hace duro, los obstáculos frenan nuestros pasos. Y en la Eucaristía el Señor nos hace recorrer su camino, aquel del servicio, del compartir, del donarse, y lo poco que tenemos, lo poco que somos, si es compartido, se convierte en riqueza, porque es la potencia de Dios, que es la potencia del amor que desciende sobre nuestra pobreza para transformarla.



Esta tarde entonces preguntémonos, adorando a Cristo presente realmente en la Eucaristía: ¿me dejo transformar por Él? ¿Dejo que el Señor que se dona a mí, me guíe para salir cada vez más de mi pequeño espacio y no tener miedo de donar, de compartir, de amarlo a Él y a los demás?



Seguimiento, comunión, compartir. Oremos para que la participación a la Eucaristía nos provoque siempre: a seguir al Señor cada día, a ser instrumentos de comunión, a compartir con Él y con nuestro prójimo aquello que somos. Entonces nuestra existencia será verdaderamente fecunda. Amen.


sábado, 8 de junio de 2013

A los 100 días de la renuncia de Benedicto XVI

Victor Codina

Una vez pasado el vendaval que sacudió no solo el Vaticano sino toda la Iglesia, quisiera hacer cuatro breves reflexiones y cuestionamientos sobre algunas experiencias que hemos vivido en estos últimos tres meses desde la renuncia de Benedicto XVI.

  1. En primer lugar llama la atención el folclore mediático que ha acompañado a estos acontecimientos, con el mismo despliegue informativo con que se cubre una boda real, unos juegos olímpicos, la concesión de los Oscar o unas elecciones políticas importantes. Tanto se comentaban las intrigas de la curia y de las finanzas vaticanas y se hacían quinielas sobre los cardenales papables, como se cuestionaba si el papa renunciante y emérito continuaría con sus zapatos rojos o llevaría otros de color café que le había fabricado un artesano mexicano… Hay que agradecer el trabajo de los medios, la Iglesia es ciertamente humana y muy humana, no podemos huir hacia fáciles espiritualismos, pero ¿ésta es la imagen de Iglesia que los cristianos reflejamos en nuestra sociedad de hoy?
  2. Quizás lo que llama más la atención es el rápido cambio de clima eclesial que se ha operado en estos tres meses. Se ha valorado mucho la renuncia del anciano papa, pero ya no se habla de crisis eclesial, ni de pederastia, ni de intrigas vaticanas, ni de los partidarios de Lefèbvre; los libros de Ratzinger que hasta ahora llenaban los estantes de las librerías católicas han dado paso a las biografías y escritos de Bergoglio. Los medios comentan las “florecillas del papa Francisco”: sus homilías sobre la misericordia y el perdón de Dios, la necesidad de ir a las periferias y “oler a oveja”, cuidar la creación, no hacer del dinero el centro de la vida, pensar más en el hambre de los pobres que en los bancos, su libertad profética ante jefes de Estado, sus deseos de edificar una Iglesia pobre y de los pobres pero que no sea una simple ONG piadosa sino la Iglesia de Jesús, sus bendiciones a niños enfermos o discapacitados, su visita a la cárcel de jóvenes el Jueves Santo, sus atenciones a un miembro de la Guardia suiza al que le ofrece una silla y un bocadillo; mantiene sus viejos zapatos negros de antes y reside fuera del Palacio Vaticano. Algo está cambiando en la Iglesia. ¿No lo notamos?
  3. Junto a todo esto, también se ha puesto de manifiesto la gran ignorancia y la deformación teológica de grandes sectores de la población cristiana sobre la Iglesia, como si la Iglesia se identificase simplemente con el Papa y la curia vaticana, como si el Papa fuese el representante de Dios en la tierra y la cabeza de toda la Iglesia. La Iglesia la formamos todos los bautizados, la única cabeza de la Iglesia es Cristo y el Papa es ante todo el obispo de Roma, como el papa Francisco repetidas veces ha manifestado, no solo por humildad sino por el sentido de colegialidad con sus hermanos en el episcopado. La misma denominación de Vicario de Cristo no es la más primitiva ni la más exacta, pues el que hace las veces de Cristo en la Iglesia es el Espíritu y en la época medieval los que eran llamados vicarios de Cristo eran los pobres. El Papa es el sucesor o vicario de Pedro, un apóstol llamado piedra y cimiento de la Iglesia, pero al que también el Evangelio llama piedra de escándalo y Satanás. ¿No habría que procurar una mayor formación de los cristianos bautizados?
  4. Por último, a pesar de todos estos cambios positivos y esperanzadores que hacen presagiar una nueva primavera eclesial, resuenan todavía en nuestros oídos las palabras proféticas del viejo obispo poeta Pere Casaldàliga:
Deja la curia, Pedro,
desmantela el sinedrio y la muralla,
ordena que se cambien todas las filacterias
por palabras de vida, temblorosas.
Todavía seguimos soñando con una Iglesia alejada del Estado Vaticano, de su bandera, su himno, su banca y su Guardia suiza, de sus nuncios diplomáticos… Soñamos con una Iglesia que vuelva a Galilea donde se manifiesta Jesús de Nazaret, el carpintero muerto y resucitado, y donde Pedro no lleva zapatos rojos, ni de color café o de color negro, sino simples sandalias de pescador. Ciertamente no podemos ser ingenuos, pero como recordaba Pedro el día de Pentecostés, el Espíritu es quien hace que los jóvenes tengan visiones y que los ancianos tengamos sueños (Hechos 2, 14-21, citando a Joel 3,1). ¿Podemos extinguir el Espíritu?