jueves, 8 de mayo de 2014

JORNADA DIOCESANA DE RETIRO EN SUCUMBÍOS – 12 – 16 de Mayo



LA ALEGRÍA DEL EVANGELIO

 Encaminados en la nueva etapa de nuestra Iglesia, bajo la guía de nuestro Pastor Mons. Celmo, como ha sido tradición en nuestra Iglesia de Sucumbíos, nos aprestamos a realizar la Jornada Diocesana de Retiro en Sucumbíos.

Un tiempo nuevo corre por la Iglesia Universal. Un aire nuevo, diría Juan XXIII hace 50 años atrás, que invitaba a abrir puertas y ventanas de la Iglesia para que entre aire nuevo. La Luz ha empezado a brillar y alumbra a todos, desde que Francisco ejerce el ministerio petrino de animar a la Iglesia Universal. El canto creado por ocasión de su primer aniversario recoge este sentir:

“Está brillando una luz
una luz en el camino,
para llegar a Jesús
de la mano de Francisco”.

Este espíritu vivificador  va llegando a Sucumbíos y nos envuelve con su alegría. Ciertamente el Francisco nos está ayudando a llegar a Jesús, el de la Misericordia, el Peregrino de Emaús, el Buen Pastor, el Resucitado.

Ya el Papa Francisco nos enviaba un cariñoso saludo en el nombramiento de nuestro Obispo, el 1° de febrero, el día de su posesión: “Finalmente dilecto hijo, con la protección de Nuestra Sra. del Quinche, imploramos para ti los dones del Espíritu Santo, para que asistido por los mismos, puedas pastorear a los fieles a tí confiados, con caridad solícita, con exigua virtud de los pastores, de hecho somos pastores en la medida en que amamos. Así mismo que la paz y la luz de Cristo estén continuamente contigo y de la queridísima Comunidad Eclesial de este Vicariato Apostólico en el Ecuador.

Acogemos la Luz, la fuerza, el coraje y la paz  de la Ruáh, que sigue llegando y nos actualiza con la alegría del Evangelio. 

Es en este clima que realizaremos la tradicional Jornada de Retiro Diocesano. Son ya 13 años ininterrumpidos de estas jornadas en el gozoso tiempo de Pascua. Desde los años 70, la emergencia del proceso pastoral emprendido a favor de la construcción de la Iglesia Local exigió tiempos fuertes e intensos de formación y reflexión. Todo esto,  dinamizados por una profunda espiritualidad, como nos anima Gustavo Gutiérrez, tomando a San Bernardo de Claraval que en materia de espiritualidad, cada cual debe “beber en su propio pozo”.

Mons. Celmo nos ha convocado a participar de esta Jornada a realizarse del 12 al 16 de mayo. Y será la Exhortación Apostólica “La alegría del Evangelio” (Evangelii gaudium) del Papa Francisco, el tema de los retiros.  

Con la predisposición debida, personal y comunitariamente, salgamos fortalecidas y fortalecidos en el Señor, recuperemos la alegría del Evangelio, para testimoniar que somos “evangelizadores con Espíritu” de una “Iglesia Misionera en salida”