martes, 26 de noviembre de 2013

I ENCUENTRO DE LA ESCUELA DE MINISTERIOS




“Hola, Mama Chofi, cómo ha estado Ud.?”, dice Don Segundo Díaz, Diácono Permanente, saludando y estrechando su mano con la abuelita negra, pequeñita pero llena de entusiasmo. Como ellos, también otras personas se saludan cordialmente al llegar al Centro de Formación ISAMIS, en Lago Agrio.

Ese día 23 de noviembre pasado se realizó el Primer Encuentro de la Escuela de Ministerios correspondiente al año pastoral 2013-2014. Como es tradición en nuestro Vicariato de San Miguel de Sucumbíos, estos encuentros trimestrales sirven para la formación y el acompañamiento de las personas que han recibido ministerios laicales reconocidos o instituidos, e incluso ordenados (diáconos permanentes y presbíteros), en nuestra Iglesia Local.

¿Cuándo y por qué nace la Escuela de Ministerios?

Empieza en el año 1992, -hace 21 años- cuando recibe ministerios reconocidos el primer grupo de personas y es ordenado un presbítero, con el fin de que tengan una instancia de encuentro y formación permanente que les ayude a fundamentar su ministerio y a mejorar su servicio a las comunidades cristianas de las que salieron y a quienes siguen sirviendo en diferentes campos y niveles.

Al momento son ya más de 150 las personas con ministerios reconocidos o instituidos y con ministerios ordenados en nuestra Iglesia. Se trata mayoritariamente de ministerios laicales y también mayoritariamente llevados por mujeres, dedicadas principalmente a tareas de evangelización, inmersas en las diferentes pastorales: campesina, urbana, negra e indígena. Hay también ministerios laicales de personas comprometidas en el campo social -hombres y mujeres- y varones con un ministerio ordenado. De esta forma, en la Escuela de Ministerios se recoge el sentido de una Iglesia Comunidad, toda ella ministerial, según el espíritu del Concilio Vaticano II.

Para recibir un ministerio reconocido o instituido una persona ha debido realizar antes un largo camino de testimonio cristiano y de servicio pastoral. Así, por ejemplo, don Segundo, el diácono campesino, hace más de 20 años, y apenas llegado de Loja, inició como animador de su comunidad cristiana, luego recibió el Ministerio Reconocido de Misionero de las Comunidades y finalmente la ordenación como Diácono.

Propuesta formativa

La propuesta formativa tiene varios elementos, uno de ellos lo describimos a continuación. Partimos de cuatro necesidades:

-        Profundizar en lo que nos dará unidad eclesial: el Plan Diocesano de Pastoral

-        Incidir en la utopía, que nos hará revisar y reafirmar el sentido y reorientará continuamente desde el Espíritu: “Liberación integral del hombre y la mujer, desde los pobres, por la causa del Reino”

-        Coincidir con lo que desde otros ámbitos eclesiales se está trabajando este año: en la Agenda Latinoamericana se quiere ahondar en el tema de la libertad. Y coincide con la primera parte de nuestra utopía.

Responder a las inquietudes expresadas por las Asambleas Diocesana y de Equipos de Vida pidiendo al Centro de Espiritualidad “Monte Carmelo” que formule una propuesta formativa para tres años desde las bases de la espiritualidad de esta Iglesia Misionera.

Tema para este año pastoral: “Liberación integral del hombre y de la mujer”

·         Este Primer Encuentro giró en torno a:

La libertad en la experiencia del Pueblo de Israel

Se empezó compartiendo la vida, según el método VER-JUZGAR-ACTUAR: cuando experimentamos la libertad y cuando no, en nuestra vida como ministerio?.

En el juzgar se vio cómo la libertad forma parte de la experiencia del pueblo de Israel, desde su experiencia de opresión, pero también desde el descubrimiento de un Dios que los quiere libres de yugos y opresiones.

Era de ver a don Amable, con sus dotes de narrador, y a su grupo de actores y actoras, como doña Eloísa, representando la historia bíblica de Gedeón con sus trompetas y cántaros improvisados!

Se dejó como tarea, hasta el siguiente encuentro, una serie de historias a leer y meditar sobre las variadas experiencias de libertad en el Antiguo Testamento.

·         El segundo Encuentro será: La libertad desde Jesús.

·         Y el tercer Encuentro: Liberados para liberar. Gálatas y la experiencia de las comunidades cristianas para vivir en misión hoy.

 

“Cristo nos liberó para ser libres.

Manténganse, pues, firmes y no se sometan de nuevo al yugo de la esclavitud” (Gl. 5, 1)