Cuando
una amiga se va, si es amiga
de verdad, deja una llama encendida, pa´ que otros
sigan sus pasos… para llegar a la ¡¡¡VIDA!!!
Y hoy queremos
compartir con nuestros amigos y amigas de ISAMIS, la celebración de la
despedida de nuestra amiga y hermana Gladys Barrezueta. Muchos y muchas la
recordarán todavía. Su cariño y entrega para acoger a los enfermos, para
llevarlos a los hospitales, para ayudarles a recuperar la vida.
La celebración de su muerte fue
realmente una fiesta bonita, llena de alegría, de esperanza, de fe... que nos
proporcionó nuestra querida Gladys hasta el último momento. Mucha gente, muchos
recuerdos, mucha vida, muchos testimonios del cariño de esa gran mujer que lo compartió con los más
pobres de Sucumbíos...
El Papa Francisco
presentaba a los jóvenes en Brasil dos
textos del Evangelio de Mateo, como la mejor guía para seguir a Jesús: Las
Bienaventuranzas y El juicio final. “Bienaventurados los pobres, los sencillos,
los limpios de corazón…..” y “Estaba enfermo y me fuiste a visitar….”, por eso
una de las ofrendas desde Isamis en este momento fue la Biblia, como expresión
de esa Palabra que Gladys hizo Vida para mucha gente.
Y así la recordamos
ayer, y la seguiremos recordando… junto a Johny, su marido, y Jesús Arroyo, y
Casimiro, y Luisito, y Hna. Rita, y Hna. Leona, y Tere Toribio, y Juan
Jiménez…. Y todos los hermanos y hermanos con quienes Gladys compartió su fe y
su amor a los pobres, y que esperamos nos ayuden ahora a recuperar la Iglesia
Viva de Jesús, esperanza de los pobres… que nos quieren destruir.
Desde aquí, nuestra
querida amiga Gladys, muchas gracias por tu amor y tu testimonio.
