Parroquia Catedral Nuestra Sra. del Cisne, 10 de
Agosto 2013
El pasado 10 de
agosto en el salón parroquial de la Catedral Nuestra Sra. del Cisne, realizamos
la Asamblea de la Unidad de la Pastoral Urbana para la evaluación del año
pastoral. Contamos con la participación de l@s delegad@s de los
sectores-parroquias de la ciudad de Nueva-Lago Agrio, algunos padres
colaboradores, los movimientos apostólicos Renovación Carismática y Juan XXIII.
Sólo estuvo ausente un Sector. Mons. Mietto estuvo presente hasta el mediodía.
Nuestra asamblea
empezamos con un tiempo para la oración, iluminados por la Palabra de Dios
tomada de Juan 12 23-26.
Como es práctica de
nuestra vivencia eclesial una vez más nos encontramos para evaluar la
programación pastoral de este año 2012 – 2013 que estamos terminando. La
asamblea de programación la habíamos realizado el pasado 8 de enero en el
Sector Este. Hacemos presente que previamente los sectores – parroquias de Sta.
Ana – Sur y Divino Niño (Oeste), ya habían realizado as evaluaciones.
El trabajo de la
evaluación, se realizó mediante la revisión de las líneas pastorales de
evangelización y social del Plan Diocesano vigente aplicadas en la Pastoral
Urbana. Con la metodología participativa se hizo los grupos de trabajo para
profundizar cada línea evaluando los logros, dificultades y sugerencias.
Posteriormente hicimos la plenaria.
El trabajo de la
plenaria se extendió más allá de lo previsto. Se pudo valorar que a pesar de
las dificultades el trabajo pastoral de la Unidad sigue firme. Las evaluaciones
en detalle a presentarse en la Asamblea Diocesana lo dirá. Hubo algunos
momentos especiales como cuando se evaluó la Línea del Compartir y la Línea de
Comunidades y Ministerios. Lo que ha sido nuestra práctica en la Pastoral del
Compartir, una vez más no ha aparecido ninguna propuesta alternativa para
mejorar, solamente se pudo saber de acciones paralelas pero que nadie se
responsabiliza ni sostiene las razones de las mismas.
En cuanto a la
Línea de Comunidades, un asunto que salió con relevancia es la valoración de la
Vigilia Permanente, donde ciertas pretensiones de determinada posición trataron
de desacreditarla. Tuvo que ampliarse el debate, lo cual sirvió para clarificar
y rectificar tal descrédito. Finalmente la asamblea aprobó una nueva redacción
del texto.
Otro punto muy
importante de la evaluación fue el eje transversal diocesano del Perdón y
Reconciliación, pero debido a falta de tiempo quedó para una próxima asamblea
extraordinaria el 20 de agosto para hacer la plenaria, el debate y
profundización.
En la Asamblea,
también realizamos un tema de formación sobre la Misión, por la importancia que
ha tenido el Año de la Fe, con la línea de Animación Misionera. Magdalena
Vallejos y las hermanas Marianitas de Pacayacu, nos compartieron el tema
“Desafíos misioneros para la Pastoral Urbana. Nos informaron del Congreso
Misionero Nacional que se realizó en Latacunga y las conclusiones del Congreso
Misionero Diocesano. Fruto de esta animación asumimos las misiones populares en
Lago Agrio para octubre mes de las misiones.
Finalmente tratamos
los asuntos varios donde se trató, entre otros puntos, sobre la participación
en la próxima Asamblea Diocesana de Pastoral. Otro asunto relevante fue la
Fiesta de la Churonita, nuestra Mamita del Cisne para el próximo 8 de
septiembre. El programa quedó organizado como se lo hace siempre en sus
diferentes niveles: la Parroquia Central, la Unidad Urbana y a nivel Diocesano.
Salvo ciertas actividades paralelas de la Parroquia Central, por lo demás todos
los sectores – parroquias se aprestan a celebrar en las diferentes comunidades
sus novenas y fiestas.
Sí queremos destacar
el impase mantenido por la secretaría del grupo de la Línea de Comunidades porque
es un hecho muy significativo. Es una falta de respeto al sentir y pensar
colectivo. No puede alguien, tomarse el nombre de tod@s para torcer la realidad
de las cosas. Eso no ayuda a la reconciliación, sino que más bien evidenció una
posición que ya sabemos. El misionero nuevo, si es que es misionero en tierra
nueva, tiene que pasar por el eslogan escucha, aprende y anuncia, y no al
revés. Por eso, se denunció en la Asamblea y lo reiteramos ahora que es una
falta de respeto lo que ha ocurrido con la memoria de la Asamblea Diocesana del
año pasado, donde nuestra evaluación urbana, la Asamblea Diocesana, han sido
sesgadas por ciertas personas que tienen que responder por este delito. De ahí
la responsabilidad y seriedad del servicio de secretaría.
La Asamblea
concluyó con el cansancio de la intensidad pero felices de haber evaluado
nuestra acción pastoral. Somos muy agradecidos por lo que pudimos realizar,
agradecidos por la participación en las diferentes comisiones y con la tarea
pendiente de continuar con la asamblea extraordinaria para evaluar el proceso
de perdón y reconciliación.