Sea como fuere, nuestra llamada hoy tiene que ver con recuperar al Siervo, precisamente cuando estamos en una situación de emergencia a nivel mundial, donde el peso de la injusticia y las víctimas que produce es innumerable. Y recuperarlo tal y como lo hizo Jesús: abajarse hasta la condición de esclavo. Abajarnos definitivamente, bajarnos de los tronos en los que continuamente nos subimos, los tronos del prestigio y del poder, de la fama y de que tengan una buena opinión de lo que hacemos y somos, de los trabajos y las misiones que desempeñamos… y de tantas cosas más. Abajarnos para poderle dar la mano al pobre y excluido y recorrer conjuntamente con él un camino que nos lleve a disfrutar de una vida plena donde todos y todas disfrutemos del banquete que Dios nos prepara.
sábado, 12 de abril de 2014
RECUPERAR AL SIERVO - Isaías 50, 4-7; Filipenses 2, 6-11; Mateo 26, 14-27, 66
Sea como fuere, nuestra llamada hoy tiene que ver con recuperar al Siervo, precisamente cuando estamos en una situación de emergencia a nivel mundial, donde el peso de la injusticia y las víctimas que produce es innumerable. Y recuperarlo tal y como lo hizo Jesús: abajarse hasta la condición de esclavo. Abajarnos definitivamente, bajarnos de los tronos en los que continuamente nos subimos, los tronos del prestigio y del poder, de la fama y de que tengan una buena opinión de lo que hacemos y somos, de los trabajos y las misiones que desempeñamos… y de tantas cosas más. Abajarnos para poderle dar la mano al pobre y excluido y recorrer conjuntamente con él un camino que nos lleve a disfrutar de una vida plena donde todos y todas disfrutemos del banquete que Dios nos prepara.