- La madre es la que cree en nuestras mentiras, aun sabiendo que no es verdad.
- Nos llama por teléfono cuando no es necesario, y telefonea para hablar de nada. Ella siempre alcanza lo que desea diciendo que es bueno para nosotros.
- Aprende con los hijos/as, pero en verdad sintoniza plenamente con los nietos/as.
- Consulta la opinión del padre para hacer todo diferente. Es compañera en la alegría en las tristezas. No acepta que alguien pueda ser mejor que ella. Tampoco que alguien sea peor que ella.
- No pide excusas, pide permiso para llorar. Llora cuando uno grita con ella. Llora siempre que uno no le contesta. Pase lo que pase, va a llorar.
- Es el Pen Drive: no alcanza colocar fuera siquiera el borrador de nuestro dibujo de la primaria. Difunde noticias sobre nuestra vida antes de que se puedan confirmar las cosas y después dice que no entiende como la gente descubrió la novedad.
- Cuestiona lo que queremos para al final apoyarlo. Intenta evitar recelos por secretos entre los hermanos/as.
- Nos constante con abrazos y besos y apodos cariñosos y sueña andar de manos por la calle con el hijo, delante de todos. Reclama del hijo para el hijo y elogia el hijo para los otros. Cuando alguien alaba su criatura, ella agradece como si fuera para ella.
- No deshace el cuarto del hijo adulto esperando que el vuelva a casa. Ella nunca tiene razón, ella é nuestra razón para vivir.
Fabricio Carpinejar, Brasil.