Un saludo cordial a todas las personas que integran las comunidades de la Iglesia de San Miguel de Sucumbíos.
Tienes en tus manos esta propuesta para vivir el Tiempo de Cuaresma. Pretendemos que sea un material que nos ayude a:
- Profundizar comunitariamente en el conocimiento de Jesús de Nazaret desde nuestra historia como pueblo de Dios de Sucumbíos.
- Reconocer que estamos siendo protegidos-as, salvados-as y liberados-as misteriosamente por Dios en este momento eclesial y social que vivimos.
- Dinamizar nuestra vocación al discipulado misionero desde la entrega continua y verdadero servicio.
- Transformar las estructuras de mal como Jesús lo hizo (examinando nuestras vidas, resistiendo a la opresión e injusticias desde una vida sencilla y desde la verdad de nuestras palabras, soportando el sufrimiento que conlleva la defensa del Evangelio y seguir proponiendo como Buena Noticia lo que hemos experimentado y vivido como salvación y liberación en nuestra Iglesia).
PREPARACIÓN DE CADA UNA DE LAS CELEBRACIONES:
- Cuidar el lugar de reunión: si puede ser en círculo. La Palabra de Dios debe ocupar un lugar central. Una luz.
- Papel del animador-a y de los ministerios: preparar previamente la celebración.
- Compartir experiencias de vida de la comunidad, así nos enriquecemos todos-as.
- Recoger la experiencia: el papel del animador-a y ministerios es escuchar lo que expresa la comunidad y preguntarnos: qué quiere Dios de nosotros y cómo respondemos a ese llamado.
40 AÑOS DE HISTORIA: ¡RECUERDA EL CAMINO!
El número 40 es un número bíblico y por lo tanto, tiene un simbolismo. 40 años son los que tardó el nuevo pueblo de Israel liberado de la esclavitud hasta llegar a la Tierra Prometida. 40 semanas es el tiempo de gestación de una mujer para dar a luz una nueva vida. 40 días son los que María necesitó para purificarse después del parto y ofrecer a su hijo primogénito en el templo de Jerusalén. 40 días son los días del ayuno de Jesús en el desierto donde fue tentado. 40 años de historia en la Iglesia de San Miguel de Sucumbíos para constituirse como pueblo de Dios que camina al lado de los pobres. 40 son los días que van desde el Miércoles de Ceniza hasta el Domingo de Ramos, y constituyen lo que los cristianos llamamos Tiempo de Cuaresma.
Para nosotr@s, Pueblo de Dios de Sucumbíos, el número 40 está lleno de significados, personas, mártires, historias y vida. Los 40 años del Camino de Iglesia que hemos recorrido, nos animan a vernos como ese pueblo de Israel en su marcha por el desierto en busca de la tierra prometida.Hemos atravesado el desierto y hemos pasado por hambres, tentación, conflicto y necesidad, le hemos exigido señales y hemos sentido la prueba con la salida de nuestro Obispo, la injusta salida de los carmelitas, el conflicto social, la presión y persecución de personas y grupos…la situación de pobreza e indignidad de muchas personas, la situación de los refugiados, la violencia intrafamiliar, la corrupción política, el abandono de los poderes públicos, las contradicciones de la justicia, nuestras propias contradicciones y divisiones, el desánimo y el sentimiento de pérdida. Dios nos ha enviado en el tiempo oportuno el maná, el agua que brota de la roca, las codornices, las personas que guían y acompañan al pueblo manteniendo viva nuestra esperanza, fe y amor.
Con toda nuestra HISTORIA, nuestra Iglesiaestá ahora invitada a entrar en esa Tierra Prometida y a disfrutar de la abundancia de dones y gracias recibidas. Pero antes de entrar en ella, Dios nos dice que volvamos nuestra mirada hacia atráspara escuchar y comprender el significado del camino que hemos recorrido.
ESQUEMA de las CELEBRACIONES:
- Cada domingo se irán añadiendo en el lugar de reunión de la comunidad, los letreros y los símbolos, como una forma de recordatorio de lo que vamos celebrando. El título que preside toda la Cuaresma será: ¡RECUERDA EL CAMINO!
- Desarrollo de cada una de las celebraciones:
- Saludo inicial y motivación del animador-a y texto bíblico inicial.
- Presentación del símbolo de la semana.
- Nuestra historia y experiencias.
- Proclamación de la Palabra de Dios y compartir por grupos.
Peticiones espontáneas y Liturgia de la Eucaristía (en los lugares donde se celebre Eucaristía)
