En América Latina la recepción del Vaticano II se llamó Medellín. El Concilio, como las Asambleas Generales del Episcopado[1], han sido la versión litúrgica contemporánea e inculturada de la Epifanía[2]. Sus pasos se repiten: la estrella, los peregrinos del oriente, la corte de Herodes en Jerusalén, Belén, el retorno de los Magos por otro camino. El contexto, evidentemente, es de la manifestación de Jesús en la menor expresión de su comunidad (en las CEBs). Su peculiaridad, desde el acontecimiento conciliar y de Medellín, lo reunimos en 7 puntos.
1. EL ACONTECIMIENTO PROFÉTICO LLAMADO EPIFANIA.
A la luz de la Epifanía vale la pena hacer una relectura de la opción hecha por los obispos de América Latina y Caribe. Es la oportunidad de no pasar por arriba de nuestra historia, considerando lo que ha sido, a la luz del Vaticano II, y en coherencia con él, haber afirmado nuestra originalidad eclesial.
Al terminar el Concilio, volvimos todos (obispos y asesores) con un gran entusiasmo y la convicción de que habíamos sido testigos de un “divisor de aguas” en la historia de nuestra Iglesia. Ya no se podría estar a espera de que, desde Roma, nos dijeran que hacer en nuestros países. Nuestra Iglesia se sentía “adulta” y animada por recién consciencia de colegialidad reafirmada en Lumen Gentium.
Los obispos de Brasil, gracias a la CNBB[3], estaban bien entrenados a trabajar en equipo. A nivel latino-americano-caribeño, el CELAM (Consejo Episcopal Latino Americano), con Avelar Vilela, Aloysio Lorscheider, Eduardo Pironio, A.Angelelli, Helder Cámara, Cándido Padín, Marcos McGrath, Leonidas Proaño, Mendes Arceo, Samuel Ruiz, Arturo Lona, Oscar Romero, Ramón Bogarín, Carlos Parteli y muchos otros, se transformara en un extraordinario articulador de la casi tres decenas de países de las tres Américas, de México a Argentina, de las grandes a las pequeñas Antillas.
Fue cuando se tomó la decisión de realizar otra conferencia general de nuestro episcopado, en la Ciudad de Medellín. El apoyo de Paulo VI ha sido inmediato y el mismo, presente en el Congrego Eucarístico Internacional, realizado en la capital de Colombia, abrió, desde Bogotá, aquella memorable IIa. Conferencia.
En ella se dieron pasos muy importantes como: - escuchar el clamor de la gente; denunciar las estructuras de pecado, crear una instancia primera de la Iglesia, menor que la parroquia, que se denominó “Comunidades Cristiana de Base”. Subrayamos: Comunidades Cristianas[4] de Base[5] (Med 15,10)[6]
Es muy importante dejar claro que la decisión de repensar la primera instancia eclesial, no ha sido con el intuito de catalogar a los bautizados católicos en una mera estructura organizacional, para que la Iglesia Católica tuviera la oportunidad de contar con un discreto censo demográfico, controlador del número de sus adeptos… Mucho diverso de todo eso - la Comunidad de Base nasció en razón de una mística misionera de la Iglesia, que pedía un cambio de orientación pastoral, para dar prioridad a su presencia como fermento evangélico en la vida.
Tampoco se trató de transformar la parroquia en una serie de comunidades menores, conservando el mismo modelo histórico de Iglesia centralizadora y centralizada, patriarcal, medieval (feudal), machista, sacramental, devocional.
Lo que está en cuestión, con las CEBs, no es ni el número de comunidades que iban a surgir en la parroquia, ni su tamaño, sino el modelo de Iglesia señal, fermento y primicia del Reino. Las CEBs nascieron para ser el primer nivel de una Comunidad pobre, misionera, ecuménica, dialogante, samaritana.
2. LA EPIFANIA COMO PARÁBOLA / RECORDANDO
Los libros sagrados de los cristianos, hablan de un evento de hace dos mil años:- Una estrella “apareció” en el Oriente y algunos “Magos” (Astrónomos? Curiosos? Líderes religiosos?) Concluyeron que se trataba de algo relacionado directamente con aquello estaba aconteciendo en razón “del rey de los judíos”. Y que era indispensable salir a buscarlo y acto seguido, adorarlo (Mt 2,2).
Mateo y Lucas, con semejanzas y diferencias[7], nos llenan de generalidades que la Tradición y los escritos Apócrifos buscaron complementar ofreciendo (Inventando?) informaciones suplementares: Que eran tres los Magos, que se llamaban Gaspar, Melchor, Baltasar, y este era negro. Venían en caravana con camellos, soldados y servidores. Eran reyes. Aportaban regalos reales como oro, incienso, mirra.[8]
El público que la recién aparecida estrella tuvo ha sido muy restricto: algunos sabios en oriente[9]. Los “Pastores que vivían en el campo” [10], en el texto de Lucas 2,8 no vieron ninguna estrella. Recibieron la noticia por medio de ángeles, canciones y una claridad (Era de noche).
De pronto[11], el hecho científico (astronómico) pasó a ser leído en clave político-religiosa[12]. Los responsables oficiales por las religiones y particularmente los del mundo judío, adonde los peregrinos del Oriente se dirigen, no han sido avisados (ni antes, ni después del fenómeno). [13]
Tenemos entonces: una estrella convocando peregrinos del Oriente que vienen hasta Jerusalén - para ellos era Occidente y para nosotros Oriente Medio (pero eso no es problema). Son mencionados tanto “el Cristo” como los profetas de la religión judía. Y el Rey Herodes siente que tiene que controlar la situación. Establece que debe ser informado de todo lo que se encuentre en Belén. Él también se declara un hombre piadoso, que desea ir “adorar” al futuro líder…
Digno de nota: hombres de otra religión, vienen anunciar la Buena Noticia a la religión que tenía pacto con Dios, y que sabía (sin ayuda de estrellas), que el lugar del líder esperado era Belén. Pero nadie se molestó para ir hasta allá. En aquel tiempo como hoy, no siempre el mayor problema era (o es, en nuestros días) la falta de información…
Pero los Magos se llevaron el fiasco de su peregrinación: llegaron, finalmente, a un pueblito perdido entre montañas; a una gruta en la periferia; a un recién nacido y su familia pobre…
Hay sutilmente, en la narración, la perspectiva de que algo importante para la humanidad, no solamente para el pueblo judío, está comenzando acontecer. Los sujetos privilegiados del anuncio e interpretación del evento, son “infieles” (Goin)…
Difícil para todos, pero principalmente para los judíos, el entender la amplitud del hecho - estaban en el centro de la historia y en el comienzo de lo definitivo de la humanidad. En ningún momento los “infieles” fueron instados a convertirse al judaísmo! Está evidente: Dios se dirige a todos los pueblos. Su perspectiva es la salvación universal.[14]
Mateo coloca en pocas palabras la estrategia final de los Magos: - Volvieron por otro camino! (- En fin no eran tan despistados como Herodes los había considerado. Además ya no necesitan de una estrella para indicarles el camino).
INTERPRETAR LA PARÁBOLA
- Desde el Oriente (Periferia) – Los que detienen el poder religioso-político, suelen considerar que donde ellos se encuentran es el centro, lo demás es periferia.
+ El mencionado Concilio Vaticano II se hizo en Europa (Roma), con mayoría de participantes y asesores del primer mundo. Por primera vez en la historia de los Concilios Ecuménicos, todos los continentes estuvieron representados[15]
Los representantes de las religiones monoteístas han sido invitados y se hicieron representar. El mismo concilio se dirigió no solamente a los miembros de la Iglesia Católica, sino que a todas las personas de buena voluntad[16]
- Una estrella - signo de los tiempos ha sido un término muy querido al Papa Juan XXIII y asumido entusiásticamente por el Vaticano II. Para verlos es necesario mirar arriba (estrella), abajo (donde se dan los pasos), a los lados (hacia a donde ir).
+ La “estrella” ha sido, para nosotros, el Vaticano II, el Papa Francisco. Están apuntando para algo muy importante, la propuesta de Jesús – el Reinado de Dios, para todos los pueblos.
Entonces, hay una nueva estrella brillando en el cielo eclesial. No es una cualquiera. Vino del extremo periférico de lo que se consideraba el centro (Europa, el Vaticano). En pocos meses llamó, positivamente, la atención de nuestros contemporáneos. No está para concentrar en ella misma, miradas e interrogantes. Apunta hacia nuevos horizontes. No trae amenazas, sino esperanzas.
- Pero, por 50 años la estrella pareció apagarse o haber sido apagada para mas perfecta hermenéutica (interpretación).
El Vaticano II, a pesar de todo, ha sido como una estrella conductora, apuntando hacia otras áreas del mundo. Los latinoamericanos interpretaron el Concilio, desde nuestro continente y para eso se dieron convocación en Medellín (ciudad de Colombia).[17]
- Los magos – no eran de la religión judía, pero atraviesan de Oriente a Occidente, para llevar la Buena Nueva
+ Quienes están siendo buena noticia para la Iglesia Católica?
– Muchos analistas concluyeron que América Latina ha sido una buena noticia para los demás miembros de la Iglesia? (Opción por los pobres, por las CEBs, por los jóvenes, denuncia del pecado estructural, cuidado de la cultura, ecología, religiosidad popular, protagonismo de los laicos, nueva evangelización…[18]
- No basta llegar a Jerusalén. Las grandes estructuras religiosas que por siglos guardan lo sagrado, no tienen monopolio de Dios y con el tiempo hasta pueden dificultar el encuentro con el Dios verdadero.
+ Donde y cuando las opciones conciliares son hostilizadas, queda confirmado que se está en el camino cierto
- ¿Dónde está el Mesías? Los principales sacerdotes y los maestros de la ley, teóricamente pueden dar informes objetivos porque conocen bien la teoría. Teóricamente saben mucho, pero no se mueven para ir investigar y recibir la gracia de aquella presencia nueva de Dios.
+ Como para aquellos Doctores y Sacerdotes y Herodes, no faltaron, en nuestros tiempos, los informes sobre las propuestas conciliares, que nunca salieron de los papeles. Nuestros líderes no dejaron de mencionar el Concilio (Se quedaba bien hacerlo… Y la aplicación del mismo se iba quedando para tiempos más propicios…)
- Belén es la meta verdadera, pero no conocida todavía por los peregrinos. Jerusalén ha sido la referencia equivocada. La gruta es la lógica de Dios. El niño y su familia, una decepción para quien esperaría la corte de David, de Salomón o el ejército de Josué.
+ Medellín y Aparecida no terminaron proponiendo una campaña mundial para proclamar el prestigio eclesial reconquistado. El Papa Francisco no se dedica a recuperar católicos “convertidos” por las otras tradiciones religiosas[19]
Como la peregrinación de los Magos, las del Vaticano II y Medellín se orientan hacia las periferias donde no hay más que un niño e una pareja sin poder, puntos de partida para el comienzo de una nueva humanidad. Es llegado el momento de definir posiciones: o aceptar la gracia de las nuevas posibilidades pastorales o combatirlas. O escuchar a los profetas, o eliminarlos.
- Otro camino. No por miedo a Herodes, sino por fidelidad al Niño Jesús, coherencia con el Reino de Dios.
+ La Iglesia y sus estructuras deben tomar otros caminos. En teoría se sabe que es hora de rehacer la referencia eclesial de base y desarrollar otro modelo eclesial, lo de una Iglesia que pide perdón; que propone orientarse por la misericordia y ternura; abierta al diálogo con todos; reconociendo los inmensos valores de la religiosidad popular con su referencia mariana, decidida al servicio samaritano y a compartir lo que tiene de mejor, su alegría de la fe y comunión con Dios, por Jesús en el Espíritu
Esa nueva comunidad eclesial se vislumbra como sencilla, pobre, con poca estructura y máximo de vida. Abierta a todos, paciente y misericordiosa.
- Confines de la tierra.
Belén ha sido el punto de partida para nuevas partes del mundo, de ahora en adelante, no se contará con la astronomía (estrella) sino con la comunidad inserta en la vida.
Los Magos no retornaron a sus tierras con una agenda para futuros encuentros, tampoco con una cartilla que indicaba todos los pasos a dar. Lo que había acontecido era un descubrimiento que cambiaba el horizonte del mundo, de la vida, de la relación con Dios y con el mundo.
Todo dependerá del camino que se tome. – Volver a Herodes, instalarse en Jerusalén o correr el riesgo de llevar al propio mundo el nuevo estilo y las nuevas metas.
[1] Las Asambleas Generales del Episcopado Latino Americano y Caribeño, realizadas después del Vaticano II, son: Medellín (1968), Puebla (1969), Santo Domingo (1992), Aparecida (2007)
[2] Literalmente Epifanía significa manifestación. Bíblicamente se refiere a la narración de Mateo 2,1-12: otros pueblos de la tierra (personalizados por los Magos), vinieron al encuentro de Jesús. Los judíos no son los únicos a relacionarse con el Mesías.
[3] Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil
[4] Puebla prefirió el nombre de Eclesial (Comunidad Eclesial de Base)
[5] El término “base”, para Medellín, nunca tuvo una connotación política. Significaba lo fundamental, lo esencial, lo básico para ser una pequeña Iglesia y no movimiento o pastoral. La confusión surgió en otros niveles de la media, porque en aquella época se insistía mucho en la “educación de base” (modelo Paulo Freire), y en algunos países del Cono Sur, significaba la instancia militante de un partido o movimiento.
[6] Esa opción de nuestra Iglesia se repitió en las asambleas episcopales siguientes (Puebla, Santo Domingo, Aparecida), apareció en Encíclicas de Paulo VI y Juan Pablo II y en casi todos los pronunciamientos de las conferencias episcopales nacionales articuladas por el CELAM. En otra parte de este artículo daremos más informaciones sobre esos puntos.
[7] El Evangelio de Mateo 2,2 habla explícitamente de una estrella. Lucas menciona una claridad 2,9, ángeles, música celestial y se menciona que hay una Buena Noticia.
[8] A pesar de las extraordinarias informaciones, nos quedamos todavía con una serie de preguntas jamás solucionadas: - Porque les ocurrió que la estrella era para indicar dónde estaba el recién nacido rey de los judíos? Por qué era importante adorarlo? Que hicieron José y María con aquellos regalos que ciertamente iban atraer la atención de ladrones y aprovechadores? Etc.
[9] Sin especificar cuantos, donde y de que naciones. Como ya lo aclaramos, una tradición posterior hasta inventó sus nombres, su raza y confirmó que eran todos varones.
[10] En aquel tiempo y en la realidad mencionada, eran personas poco confiables y hasta se les consideraban “ladrones”.
[11] Y en aquel tempo no sería diferente.
[12] “Donde está el “REY DE LOS JUDÍOS”… hemos visto “SU ESTRELLA”… venimos “ADORARLO”
[13] Tampoco se aclara si llegaron a ver la estrella, siquiera en el tramo final, ya sobre la gruta. La tradición divulgó que “no”. Mateo en 2,9 menciona que: - “La estrella que habían visto en Oriente iba delante de ellos, hasta que se paró sobre el lugar en que estaba el niño”. (Después la “bendita” ya no aparece – Por necesidad de mantenimiento? - Por ya haber terminado su misión!)
[14] Quien se atrevería a explicarles que allí, en la mera gruta, estaba el mismo Dios del universo?
[15] Datos no confirmados apuntan la presencia de 120 naciones o más.
[16] Cf. Discurso de Juan XXIII, inaugurando el Vaticano II (Gaudet Mater Ecclesia)
[17] Sin embargo, en la lógica evangélica, ningún tiempo, ninguna área es punto de llegada…también América Latina y el Caribe. Todos tenemos que estar siempre en camino hacia las periferias existenciales. Tampoco la Iglesia católica puede ser auto-referencial. Dios no tiene “dueños”.
[18] El acontecimiento litúrgico de la Epifanía es la oportunidad para manifestar a Jesús, no tanto en la multitud de 1.200.000.000 de fieles, sino en la pequeña célula eclesial que quiere ser fermento evangélico de vida y salvación, en todas las realidades humanas, como en Lumen Gentium ha sido descrito: LG 26.
[19] El Concilio fue decidido por todas las autoridades religiosas, publicado para todo el mundo. Estudiado en los seminarios y congresos. Y qué aconteció?
Como la peregrinación de los Magos, las del Vaticano II y Medellín se orientan hacia las periferias donde no hay más que un niño e una pareja sin poder, puntos de partida para el comienzo de una nueva humanidad. Es llegado el momento de definir posiciones: o aceptar la gracia de las nuevas posibilidades pastorales o combatirlas. O escuchar a los profetas, o eliminarlos.
- Otro camino. No por miedo a Herodes, sino por fidelidad al Niño Jesús, coherencia con el Reino de Dios.
+ La Iglesia y sus estructuras deben tomar otros caminos. En teoría se sabe que es hora de rehacer la referencia eclesial de base y desarrollar otro modelo eclesial, lo de una Iglesia que pide perdón; que propone orientarse por la misericordia y ternura; abierta al diálogo con todos; reconociendo los inmensos valores de la religiosidad popular con su referencia mariana, decidida al servicio samaritano y a compartir lo que tiene de mejor, su alegría de la fe y comunión con Dios, por Jesús en el Espíritu
Esa nueva comunidad eclesial se vislumbra como sencilla, pobre, con poca estructura y máximo de vida. Abierta a todos, paciente y misericordiosa.
- Confines de la tierra.
Belén ha sido el punto de partida para nuevas partes del mundo, de ahora en adelante, no se contará con la astronomía (estrella) sino con la comunidad inserta en la vida.
Los Magos no retornaron a sus tierras con una agenda para futuros encuentros, tampoco con una cartilla que indicaba todos los pasos a dar. Lo que había acontecido era un descubrimiento que cambiaba el horizonte del mundo, de la vida, de la relación con Dios y con el mundo.
Todo dependerá del camino que se tome. – Volver a Herodes, instalarse en Jerusalén o correr el riesgo de llevar al propio mundo el nuevo estilo y las nuevas metas.
[1] Las Asambleas Generales del Episcopado Latino Americano y Caribeño, realizadas después del Vaticano II, son: Medellín (1968), Puebla (1969), Santo Domingo (1992), Aparecida (2007)
[2] Literalmente Epifanía significa manifestación. Bíblicamente se refiere a la narración de Mateo 2,1-12: otros pueblos de la tierra (personalizados por los Magos), vinieron al encuentro de Jesús. Los judíos no son los únicos a relacionarse con el Mesías.
[3] Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil
[4] Puebla prefirió el nombre de Eclesial (Comunidad Eclesial de Base)
[5] El término “base”, para Medellín, nunca tuvo una connotación política. Significaba lo fundamental, lo esencial, lo básico para ser una pequeña Iglesia y no movimiento o pastoral. La confusión surgió en otros niveles de la media, porque en aquella época se insistía mucho en la “educación de base” (modelo Paulo Freire), y en algunos países del Cono Sur, significaba la instancia militante de un partido o movimiento.
[6] Esa opción de nuestra Iglesia se repitió en las asambleas episcopales siguientes (Puebla, Santo Domingo, Aparecida), apareció en Encíclicas de Paulo VI y Juan Pablo II y en casi todos los pronunciamientos de las conferencias episcopales nacionales articuladas por el CELAM. En otra parte de este artículo daremos más informaciones sobre esos puntos.
[7] El Evangelio de Mateo 2,2 habla explícitamente de una estrella. Lucas menciona una claridad 2,9, ángeles, música celestial y se menciona que hay una Buena Noticia.
[8] A pesar de las extraordinarias informaciones, nos quedamos todavía con una serie de preguntas jamás solucionadas: - Porque les ocurrió que la estrella era para indicar dónde estaba el recién nacido rey de los judíos? Por qué era importante adorarlo? Que hicieron José y María con aquellos regalos que ciertamente iban atraer la atención de ladrones y aprovechadores? Etc.
[9] Sin especificar cuantos, donde y de que naciones. Como ya lo aclaramos, una tradición posterior hasta inventó sus nombres, su raza y confirmó que eran todos varones.
[10] En aquel tiempo y en la realidad mencionada, eran personas poco confiables y hasta se les consideraban “ladrones”.
[11] Y en aquel tempo no sería diferente.
[12] “Donde está el “REY DE LOS JUDÍOS”… hemos visto “SU ESTRELLA”… venimos “ADORARLO”
[13] Tampoco se aclara si llegaron a ver la estrella, siquiera en el tramo final, ya sobre la gruta. La tradición divulgó que “no”. Mateo en 2,9 menciona que: - “La estrella que habían visto en Oriente iba delante de ellos, hasta que se paró sobre el lugar en que estaba el niño”. (Después la “bendita” ya no aparece – Por necesidad de mantenimiento? - Por ya haber terminado su misión!)
[14] Quien se atrevería a explicarles que allí, en la mera gruta, estaba el mismo Dios del universo?
[15] Datos no confirmados apuntan la presencia de 120 naciones o más.
[16] Cf. Discurso de Juan XXIII, inaugurando el Vaticano II (Gaudet Mater Ecclesia)
[17] Sin embargo, en la lógica evangélica, ningún tiempo, ninguna área es punto de llegada…también América Latina y el Caribe. Todos tenemos que estar siempre en camino hacia las periferias existenciales. Tampoco la Iglesia católica puede ser auto-referencial. Dios no tiene “dueños”.
[18] El acontecimiento litúrgico de la Epifanía es la oportunidad para manifestar a Jesús, no tanto en la multitud de 1.200.000.000 de fieles, sino en la pequeña célula eclesial que quiere ser fermento evangélico de vida y salvación, en todas las realidades humanas, como en Lumen Gentium ha sido descrito: LG 26.
[19] El Concilio fue decidido por todas las autoridades religiosas, publicado para todo el mundo. Estudiado en los seminarios y congresos. Y qué aconteció?
