COMPARTIR LA ALEGRÍA DEL EVANGELIO
María que ha encontrado la gracia de Dios, con su Sí valiente ayuda a concretar las esperanzas de los pobres. Es habitada por la fuerza del Espíritu Santo. Y así llena de Dios toma la firme decisión de salir de su yo y salir a compartir la experiencia del Dios que se encarna y se hace historia.
El Evangelio, llevar a Jesús Buena Noticia dentro, provoca alegría. Hay que compartir esta Buena Noticia.
Esta actitud misionera, es necesaria y urgente para que las esperanzas tomen forma.
La alegría del Evangelio, es compartida por dos mujeres que desde ese lugar de exclusión tejen la historia de nuestra salvación, es la historia de nuestra liberación.
María salta de júbilo y se alegra de ser dichosa, porque contempla al Dios de la promesa y la esperanza, cumpliendo y haciendo justicia, que realmente las cosas comienzan a cambiar en esta historia y ya. Las esperanzas se hacen realidad. El cambio comienza con el corazón pero trasciende produciendo cambio en las estructuras sociales, políticas y económicas.
María que ha encontrado la gracia de Dios, con su Sí valiente ayuda a concretar las esperanzas de los pobres. Es habitada por la fuerza del Espíritu Santo. Y así llena de Dios toma la firme decisión de salir de su yo y salir a compartir la experiencia del Dios que se encarna y se hace historia.
El Evangelio, llevar a Jesús Buena Noticia dentro, provoca alegría. Hay que compartir esta Buena Noticia.
Esta actitud misionera, es necesaria y urgente para que las esperanzas tomen forma.
La alegría del Evangelio, es compartida por dos mujeres que desde ese lugar de exclusión tejen la historia de nuestra salvación, es la historia de nuestra liberación.
María salta de júbilo y se alegra de ser dichosa, porque contempla al Dios de la promesa y la esperanza, cumpliendo y haciendo justicia, que realmente las cosas comienzan a cambiar en esta historia y ya. Las esperanzas se hacen realidad. El cambio comienza con el corazón pero trasciende produciendo cambio en las estructuras sociales, políticas y económicas.
Dios hoy nos llama a un MOMENTO NUEVO
A caminar junto con su pueblo
Es hora de transformar lo que no da más
Solito y aislado ninguno es capaz
Por eso ven, entra a la rueda con todos
También tú eres muy importante.
