miércoles, 30 de octubre de 2013

30 octubre 2013 – III Aniversario “DÍA DE LA IGLESIA COMUNIDAD PUEBLO DE DIOS AL SERVICIO DEL REINO”

El 30 de octubre del 2010 se dio inicio a una nueva etapa en la vida de nuestra Iglesia de San Miguel de Sucumbíos. Hoy, 30 de octubre, cumplimos 3 años de una experiencia nueva, rica en espiritualidad, marcada por el carácter martirial, como signo cristiano que conduce a la Pascua.
 
Somos un pueblo que tiene memoria, que tiene historia, por eso recordamos esta fecha, desde donde se va fraguando nuestra Historia de Salvación.
 
Damos sentido a toda esta experiencia de Iglesia, uniéndonos a la Iglesia Martirial de nuestra América Latina y del mundo entero, que asume esta historia como un Kairós, un tiempo de Dios y de gracia. Vivimos este tiempo como una grandiosa oportunidad, como hijos e hijas de Dios y parte viva de la Iglesia Católica, celebrando lo que somos: Iglesia Comunidad Pueblo de Dios, al servicio del Reino.
 
 
La “Vigilia Permanente” expresa cada noche nuestro espíritu de unión, que por 400 días ininterrumpidos, ha sido un signo del Dios vivo, presente en nosotros y en nuestra Iglesia Comunidad. Un signo de vida y de esperanza en la Justicia que viene de Dios, como la viuda del Evangelio que espera y confía en que el Juez escuche su clamor y se le haga Justicia.
 
Desde esta tierra amazónica del oriente ecuatoriano en la que el Seños nos ha dado el privilegio de vivir, tierra de pueblos ancestrales en donde hace solo poco más de 40 años vivían comunidades como los Cofanes; desde aquí expresamos los signos de la vida, la vida que vivimos y queremos vivir en plenitud: luz y cruz como expresión del Dios de la vida.
 
Es lo que somos, sabemos y hemos aprendido: “AMAR LA VIDA” en primer lugar, desde la VIDA que se expresa en Comunidad a ejemplo de la familia trinitaria de Jesús. Por eso, mantenemos la Comunidad y la Iglesia Comunidad al servicio del Reino para enfrentar el egoísmo que acecha el corazón humano y quiere implantarse como sistema globalizado para la humanidad.
 
Somos Comunidad Pueblo del Señor, Pueblo de Dios en camino y caminamos hacia el Reino de la Vida, el Reino proclamado por Jesús y expresado en la vida de cada persona, especialmente en aquellos en donde la injusticia se hace más fuerte, en una opción clara por los pobres entre los pobres, haciendo caso omiso al llamado evangélico de “Amar al otro como a nosotros mismos”.
 
En estos días corren nuevos y buenos aires por la Iglesia Universal y el mundo, desde que Francisco, humildemente pidió la bendición al Pueblo de Dios y asumió el ministerio petrino de la comunión universal. El Concilio Vaticano II ha sido retomado y lo que hemos impulsado en ISAMIS - Iglesia de San Miguel de Sucumbíos, en estas últimas décadas, es la fidelidad a Jesús y su Evangelio, desde el Espíritu de conciliación en nuestra historia y para el tiempo actual.
 
Nuestra Iglesia Comunidad de San Miguel de Sucumbíos bendice la inspiración y acción del Papa Francisco; y todas las personas que la conformamos, agradecemos a Dios y pedimos al Espíritu por él, para que estos nuevos aires de esperanza lleguen a todos los rincones de la Iglesia en el mundo y al Ecuador:
 
Esperamos que Francisco, hoy Papa, que nos ha dado testimonio de humildad, compasión y misericordia tenga un espacio en su corazón para escuchar a esta pobre viuda de ISAMIS.
 
Esperamos que nuestro querido hermano mayor en la fe nos diga cuál es nuestro error para enmendar.
 
Esperamos a nuestro Obispo definitivo que “huela a oveja”, como dice el Papa.
 
Seguimos con la paciencia histórica y la madurez de estos tres años esperando, esperando y esperando.
 
Damos gracias a la Vida, por esta oportunidad de vivir el Evangelio. Creemos profundamente en Jesús, como Hijo amado de Dios, a quién hemos encontrado y seguido en su ejemplo; y en Iglesia Comunidad de los y las discípulos/as misioneros/as de Jesús.
 
En ISAMIS hemos vivido el mensaje evangélico con profundo amor; y desde la Paz que el Dios de la vida nos concede, nos unimos a Don Pedro Casaldáliga al decir que “todo es relativo menos el Reino y el hambre”, lo que importa es la VIDA.
 
Celebramos que somos hombres y mujeres de Comunidad y que somos la “Iglesia Comunidad” de San Miguel de Sucumbíos, Iglesia que confía y espera, desde la inspiración del Espíritu de Dios presente en la historia, como Pueblo de Dios.
 
Yo soy feliz en la Comunidad
en la Comunidad yo soy feliz